sábado, 7 de noviembre de 2009

"Nuestro futuro"

Bueno, quizá aún yo sea muy joven para hablar con total propiedad sobre esto, pero alguna pincelada podría dar... total, a veces soy irreverente.

Cuando me preguntan acerca de mis pretensiones para el futuro y yo contesto con sinceridad, tiendo a volar muy alto. Tiendo, también, a revelar más de lo que desean saber.

Las preguntas, por lo general, se relacionan con la carrera. Al entrar en confianza, surgen las dudas sobre el estilo de vida y, finalmente, "sentar cabeza" ...Y ahí es donde estamos en planos diferentes.

Comúnmente, "sentar cabeza" se entiende como "casarse y tener hijos". Hasta la persona más desordenada del mundo dice que alguna vez lo hará. Pero... ¿realmente es necesario hacer estas dos cosas para asentarse? Me parece un cliché el hecho de casarse y reproducirse. Es un estilo de vida entre varios, entre muchos, que podemos escoger.

En Paraguay, las opciones son limitadas y casi todas ellas complicadas. No por propia voluntad, sino por numerosas trabas sociales. Imaginemos, entonces, lo estrecho que se hace el camino si una elige el himeneo como futuro (aunque a primera vista el casamiento sea algo aceptable): necesitará un marido (porque en esta patria, todavía, solamente es legal el matrimonio heterosexual) y, bueno, hará lo que hacen todas las personas que se casan, eligen a la persona más decente entre las que conocen.

Algo que no siempre se tiene en cuenta es que el matrimonio no es como lo pintan las películas y telenovelas de taquilla, que el amor no es eterno como desde que tenemos memoria nos hacen soñar. Es verdad que, pese a lo que digo, en las relaciones humanas no hay reglas. Podría decirse que solamente hay excepciones. He oído de clásicas relaciones que no son tan clásicas después de todo, pues sobreviven al trajín de este mundo loco, y no todas las relaciones logran eso.

Pero... ¿es tan malo querer seguir nuevos caminos? No querer decirle a una persona "construyamos un futuro juntos" no significa no tener ganas de construir un futuro en soledad. Y tener ganas de construir un futuro en soledad no significa dejar de luchar por mejorar el mundo.

Es tiempo de ampliar las perspectivas y aumentar las posibilidades. Así podríamos, quién sabe, cambiar nuestros objetivos: esto no tiene por qué ser algo malo. Y si nos parece bien adecuarnos al futuro más cliché, por favor no molestemos a aquellas personas que quieren hacer las cosas de manera un poquito distinta.

Canción recomendada de hoy: Autosuficiencia, de Parálisis Permanente

1 comentario:

  1. Interesante, Yeru. Pienso, que más que un "cliché" el matrimonio forma parte de una gran estructura prediseñada por, entre otras, la iglesia. No reniego al matrimonio como institución, pero como bien dijiste, es algo por lo que podemos optar y si decidimos no hacerlo, no dejamos de cumplir nuestro rol dentro de una sociedad. Un saludo!

    ResponderEliminar